Eleazar López Contreras
(Queniquea, 1883 - Caracas, 1973) Militar y político venezolano que fue presidente de la República entre 1936 y 1941. En su juventud fue uno de los sesenta tachirenses que llegó a Caracas con la Revolución Liberal Restauradora. Según su propio testimonio, ofrecido en la obra El general Cipriano Castro, su enrolamiento se produjo a los dieciséis años de edad, imbuido por el profundo carisma que Cipriano Castro despertaba entre sus paisanos de la región tachirense.
Eleazar López Contreras
Su carrera militar se desarrolló bajo la égida de importantes caudillos, como Diego Bautista Ferrer, bajo cuyo mando actuó en la defensa del país frente al bloqueo naval de 1902. El futuro presidente desempeñó distintos cargos administrativos durante la dictadura de Juan Vicente Gómez (1908-1935). En el año 1919 fue nombrado director de Guerra, puesto desde el que favoreció la instrumentación de la Aviación Militar. Desde 1920 hasta 1926 realizó distintos viajes al exterior. En 1924 ejerció la jefatura de la delegación militar venezolana en Perú. Entre 1928 y 1929 se desempeñó como jefe de la Guarnición de Caracas.
A pesar de servir con fidelidad al régimen de Gómez, Eleazar López Contreras no apoyó sus medidas represivas durante los alzamientos de 1928 y 1929 y pidió ser trasladado al Táchira. Volvió luego a Maracay, y Juan Vicente Gómez lo nombró jefe interino del Estado Mayor del Ejército (1930) y ministro de Guerra y Marina (1931-1935), cargo desde el que unificó y modernizó estos cuerpos.
Al morir el presidente Juan Vicente Gómez (17 de diciembre de 1935) se produjeron numerosas revueltas que López Contreras reprimió haciéndose con el control de la situación. Nombrado presidente provisional por el Consejo de Ministros (1935), al año siguiente fue ratificada la elección, desempeñando el cargo hasta 1941.
Eleazar López Contreras llevó a cabo una política levemente aperturista, promulgó una nueva constitución (1936) y potenció las obras públicas. Su reforma constitucional incluyó la reducción del período presidencial a cinco años y prohibió la reelección inmediata. Intentó propiciar una transición pacífica hacia la democracia entregando el 5 de mayo de 1941 el poder a su sucesor, el general Isaías Medina Angarita. Tras el derrocamiento de éste por un golpe de estado militar, López Contreras fue juzgado y desterrado a Estados Unidos. Permaneció en el exilio desde 1945 hasta la caída de Marcos Pérez Jiménez en 1958; a su regreso fue designado senador vitalicio.
Hombre educado en la mejor tradición tachirense de respeto a la familia, la propiedad y el ideario bolivariano, su obra escrita así lo expresa. Es de los pocos presidentes republicanos de Venezuela que dejó testimonio de su gestión y de su percepción del contexto social y político que le tocó vivir. Aunque todavía tuvo una cierta participación, activa y polémica, en la vida política del país, en sus últimos años se centró sobre todo en escribir los diversos títulos que constituyen su obra.
Cómo citar este artículo:
Tomás Fernández y Elena Tamaro. «» [Internet].
Barcelona, España: Editorial Biografías y Vidas, 2004. Disponible en
[página consultada el ].