Juan José Landaeta

(Caracas, 1780 - Cumaná, 1814) Músico y patriota venezolano al que se atribuye la canción patriótica Gloria al Bravo Pueblo (1810), que en 1881 se convertiría en himno nacional por decreto del presidente Antonio Guzmán Blanco. Algunos musicólogos, sin embargo, sostienen que dicha partitura fue obra de Lino Gallardo, compositor formado como él en la Escuela de Chacao y también activo en la causa emancipadora, por la que ambos compartieron prisión en La Guaira.


Juan José Landaeta

Juan José Landaeta creció en una familia de «pardos» (mulatos), colectivo social claramente discriminado en aquella época. Existía no obstante en la capital venezolana, en el Oratorio de San Felipe Neri, un centro de enseñanza fundado por el padre Sojo que admitía entre sus alumnos a músicos de estratos sociales inferiores: la llamada Escuela de Chacao, que debe su nombre al hecho de que las clases en el oratorio se combinaban con visitas a la hacienda La Floresta del padre Sojo, ubicada en Chacao. Allá se realizaban encuentros sociales y musicales a propósito de las cosechas de café y otras festividades; eran asimismo frecuentes las largas estancias de los alumnos en dicha hacienda.

En ese centro tuvo como maestro a Juan Manuel Olivares y compartió formación con músicos y compositores de la talla de Cayetano Carreño, José Ángel Lamas, Lino Gallardo, Pedro Nolasco Colón y José Francisco Velázquez. El cultivo de la música sacra respondía al espíritu de aquella institución, de modo que la herencia musical recibida por Landaeta fue la de un estilo sentimental y expresivo, con gran sencillez de recursos armónicos y contrapuntísticos: temas sacros escritos para dos, tres, o cuatro voces, de ritmo similar o textura homofónica, que alternaban con un solo vocal. Entre las melodías compuestas por Juan José Landaeta en solitario o en colaboración en aquellos años de aprendizaje se encuentran Tantum ergo, escrita junto al maestro José Francisco Velázquez (1798); una Salve regina a cuatro voces, compuesta en 1800, y un Pésame a la Virgen (sin fecha). Después de 1800 no se conoce ninguna otra composición sacra de Landaeta.

La inauguración del Teatro El Conde en la ciudad dio a Landaeta la oportunidad de dirigir la orquesta que acompañó la primera temporada de ópera que se hiciera en Caracas (1808), a cargo de la compañía de M. Espenú. El honor se lo brindaría su inquietud autodidacta, que lo había llevado a hablar correctamente el idioma francés. En 1805 propuso la creación de una escuela de primeras letras para pardos, que si bien aprobó el ayuntamiento, se ignora si fue llevada a la práctica.

Juan José Landaeta no quedó al margen de la suerte que corrieron muchos caraqueños por los azares de la revolución independentista de 1810. Influido por las invasiones de Francisco de Miranda en 1806, por la conjura de 1808, por la lectura de alguna literatura liberal y, nuevamente, por su conciencia de clase, formó parte de los músicos conspiradores que, cuando estalló la revolución, tocaban aquel jueves santo en la catedral mientras se procedía a prender al gobernador Vicente de Emparan y Orbe; y estuvo en la lista de los «cien conspiradores de la revolución» publicada por José Domingo Díaz, enemigo acérrimo de Simón Bolívar y del movimiento independentista.

Cuando se instaló la Sociedad Patriótica en 1810, Landaeta y otro grupo de compañeros fundaron un club paralelo, más democrático y demagógico, llamado «los sin camisa»; ese mismo nombre tomó la canción, compuesta por Landaeta, que llegó a convertirse en el canto oficioso de aquel club que pretendía emular a los sans-culottes de la Revolución Francesa. También fue obra de Landaeta el himno Gloria, americanos, compuesto con motivo de la constitución del Primer Congreso Nacional de Venezuela (1811).

Sobre la muerte de Landaeta se ha especulado bastante. En 1812 fue hecho prisionero por el realista Domingo Monteverde y llevado junto a Lino Gallardo a las bóvedas de La Guaira, de donde se presume que fueron rescatados por Bolívar en 1813, durante la Campaña Admirable. Al año siguiente formó parte del éxodo de los caraqueños por causa de las irrupciones de José Tomás Boves y sus ejércitos de llaneros. Y se cree que en Cumaná fue apresado y fusilado junto a una banda de músicos, el 5 de diciembre de 1814.

Cómo citar este artículo:
Tomás Fernández y Elena Tamaro. «» [Internet]. Barcelona, España: Editorial Biografías y Vidas, 2004. Disponible en [página consultada el ].