Diego de Nicuesa

(Baeza, ? - ?, 1511) Explorador español. Fundó en 1510 la ciudad de Nombre de Dios en el istmo de Panamá. Asumió el mando del Darién, cuya colonización le había sido concedida por Fernando el Católico, pero fue expulsado por los colonos del territorio, que lo embarcaron en un navío del que nada se volvió a saber.

Proveniente de una noble familia, Diego de Nicuesa ocupó un empleo de confianza en la casa de Enrique Enriquez, tío del rey Fernando el Católico. En 1507, en una reunión con el rey, solicitó, al mismo tiempo que Alonso de Ojeda, un cargo de gobernador en América, petición que les fue concedida a ambos: se confió Nueva Andalucía (actual Colombia) a Ojeda, y Veragua y Darién (parte de Colombia y Panamá) a Nicuesa. Ello ocasionó enemistades entre los dos a propósito del lugar donde establecer la frontera que separase sus respectivas jurisdicciones, la cual se fijó finalmente en el río Grande del golfo de Urabá (actual río Atrato, en Colombia).

Diego de Nicuesa zarpó de Santo Domingo en 1509, después de meses de preparación, con siete barcos y 580 tripulantes, y al llegar a Cartagena de Indias (Colombia), socorrió a Alonso de Ojeda, que había sido atacado por los indios. Juntos asaltaron y destruyeron el poblado de Turbaco, consiguiendo un importante botín. Enseguida continuó su viaje, pero naufragó y estuvo a punto de morir en varias ocasiones, en el mar y en islas donde se refugió, a causa del abandono de Lope de Olano, el capitán al que había confiado la escuadra, quien, no obstante, le rescató más tarde junto con lo que restaba de la tripulación, lo cual no evitó que fuera condenado a muerte por su deserción, pena que luego se conmutó por trabajos humillantes.

En 1510, después de este accidentado viaje, consiguió llegar al istmo de Panamá, donde halló una tierra fértil y fundó una ciudad a la que llamó Nombre de Dios. Allí estuvo a punto de perecer de nuevo por falta de alimentos hasta que Rodrigo Colmenares se presentó con una embarcación llena de víveres y reclamó su presencia como gobernador en la colonia de Nuestra Señora de la Antigua, en el territorio de Darién.

Al llegar a la colonia, los habitantes habían sido avisados de su llegada y puestos en su contra por compañeros de Colmenares, que deseaban que siguiese en el poder el gobernador Martín Fernández de Enciso. Se dijo que quería desposeer a los colonos y quedarse con el oro y, nada más arribar a puerto, cuando ya había sido destituido por el gobierno español a causa de sus fracasos, Diego de Nicuesa fue expulsado y echado al mar en una pequeña embarcación. Murió probablemente en el océano o asesinado por los indios en Cuba.

Cómo citar este artículo:
Tomás Fernández y Elena Tamaro. «» [Internet]. Barcelona, España: Editorial Biografías y Vidas, 2004. Disponible en [página consultada el ].