Michel Leiris

(París, 1901 - Saint-Hilaire, 1990) Escritor francés. Fue un destacado representante del surrealismo, cuyas ideas dejaron huella en obras como Alto mal (1943). Con posterioridad, ahondando en la recreación del lenguaje a través del análisis psicoanalítico, desarrolló una de las carreras literarias más fértiles e interesantes de la Francia contemporánea.

Michel Leiris

Nacido en una familia de la burguesía, Michel Leiris siguió estudios clásicos y se incorporó tempranamente a las filas del surrealismo, movimiento en el que debutó con los versos de Simulacre (1925), las prosas de Le Point cardinal (1927) y el estrambótico Glossaire, j'y serre mes gloses (1939), textos que serían agrupados posteriormente en Mots sans mémoires (1969). Otras obras del mismo período son Alto mal (1943) y la novela en prosa poética Aurore (publicada en 1946 pero escrita en los inicios de su trayectoria).

Cada vez más interesado por la etnografía, participó en varias expediciones; como resultado de una misión etnológica que lo llevó de Dakar a Djibouti (1931-1933), escribió el diario de viaje El África fantasma (1934), que comprende apuntes de trabajo y reflexiones personales. A su regreso se estableció como funcionario en el Musée de l'Homme de París. Junto con Georges Bataille y Roger Caillois, fundó el Collège de Sociologie, y participó en la redacción del libro colectivo Pour un collège de sociologie (1938) con el ensayo Lo sagrado en la vida cotidiana. Más tarde efectuó otros viajes por África, Argelia, las Antillas, China y Cuba.

Con Edad de hombre (1939) se produjo un cambio decisivo en su producción. El libro pertenece al género confesional, pero renovado completamente, según las ideas expresadas en el prefacio a la edición de 1946 titulado Sobre la literatura considerada como una tauromaquia. Para Leiris, la literatura ha de entenderse como riesgo, acción o aventura personal. La obra literaria carece de valor si no se enfrenta como un desafío, como un toro al que es preciso lidiar; y se lidia poniendo al desnudo obsesiones, confesando sin pudor lo que más incomoda, renunciando a artificios, describiendo y analizando sin cortapisas. Leiris había descubierto hacia 1929 el psicoanálisis, y lo utilizó con maestría en esta obra, que constituye una especie de autobiografía dialéctica; al tratarse de un ejercicio de raíz psicoanalítica, la confesión pasa de un tema a otro en virtud de asociaciones que escapan a la lógica, algo por lo demás habitual en el surrealismo, tributario a su vez, en buena medida, de los hallazgos de Freud.

Profundizó en esa búsqueda en el ciclo La regla del juego. Los cuatro volúmenes que lo componen, Tabladuras (1948), Zarandajas (1955), Fibrillas (1966) y Rumor (1976), a menudo han sido comparados con la "recherche" de Marcel Proust; sin embargo, no se limitan a contar la vida, sino que intentan transformarla, como proponía Rimbaud, tomando al lector como espectador y cómplice. Destaca también Noches sin noche (1947), un verdadero registro de sueños, con el lema de Gérard de Nerval: "El sueño es una segunda vida".

Cómo citar este artículo:
Tomás Fernández y Elena Tamaro. «» [Internet]. Barcelona, España: Editorial Biografías y Vidas, 2004. Disponible en [página consultada el ].