Manuel Gálvez

(Paraná, 1882 - Buenos Aires, 1962) Narrador argentino representante de la novela realista tradicional. De distinguida ascendencia española, estudió con los jesuitas de Santa Fe y se graduó en Leyes en Buenos Aires, pero no se dedicó al ejercicio de la profesión de abogado. En lugar de ello, cultivó el periodismo desde que se inició en la vida literaria con la publicación de un trabajo sobre Ibsen en Nuestra Época de Santa Fe.

Manuel Gálvez

Manuel Gálvez fundó además la revista Ideas y colaboró en La Nación y otros periódicos y revistas, y fue inspector de Enseñanza, lo que le permitió un intenso y amplio contacto con la vida y el ambiente del país. Pasó el Atlántico en tres ocasiones (1906, 1910 y 1926). Ideológicamente evolucionó con paso firme de un liberalismo ponderado a un catolicismo a lo Maurice Barrès, es decir, de estirpe nacionalista, y tuvo un adversario decidido en el poeta Leopoldo Lugones. En 1910 contrajo matrimonio con Delfina Bunge.

Gálvez fue un escritor realista de tendencias naturalistas e inquietudes ideológicas, que tuvo presente como novelista a Benito Pérez Galdós y como ensayista a Ángel Ganivet para mirar por dentro a su patria argentina, en sus costumbres y en su evolución histórica. Es necesario señalar que a medida que se iba intensificando en su producción la pretensión psicológica y la preocupación religiosa, sus páginas iban perdiendo calidad artística.

Es perceptible la distancia entre La maestra normal (1914), por una parte, y La sombra del convento (1917), El cántico espiritual (1923), La tragedia de un hombre fuerte (1922), Miércoles Santo (1930), La noche toca a su fin (1935) y Cautiverio (1935), por otra. En el plano de sus mejores novelas, junto a la ya citada (La maestra normal), se encuentran Nacha Regules (1919), Premio Municipal de Buenos Aires, pintura del bajo ambiente bonaerense, y su complemento Historia de arrabal (1923), en que el autor muestra singularidades de técnica y estilo.

Comenzó Gálvez como poeta con El enigma interior (1907) y siguió en el mismo plan lírico en Sendero de humildad (1909), con influencias postrománticas y simbolistas que no desdibujan su honda inquietud hispanista, cristiana y argentina. Al ensayista y crítico lo encontramos en los libros El solar de la raza (1913), La vida múltiple (1916), Amigos y maestros de mi juventud (1944) y El novelista y las novelas (1959). Publicó también biografías de Francisco de Miranda, Domingo Faustino Sarmiento, Hipólito Yrigoyen, Gabriel García Moreno y otros personajes; escribió para el teatro El hombre de los ojos azules (1928) y Calibán (1943); y fue autor de libros de tema histórico, cual Escenas de la Guerra del Paraguay (tres volúmenes, 1928-1929) y La muerte en las calles, novela histórica sobre las invasiones inglesas de Buenos Aires (1949).

Obtuvo el Premio Mitre con Los caminos de la muerte (1928) y el Premio Nacional de Literatura con El general Quiroga (1932). Aunque fue un maestro del realismo argentino con un valor de época indiscutible, los libros de Gálvez se vieron pronto tan superados como la estética en que se inscribían. Su obra a partir de los años cincuenta incluye Tiempo de odio y angustia (1951), Han tocado a degüello (1840-1842) (1951), Bajo la garra anglo-francesa (1953), Y así cayó Don Juan Manuel (1954), Las dos vidas del pobre Napoleón (1954), El uno y la multitud (1955), Tránsito Guzmán (1956), Poemas para la recién llegada (1957), Perdido en su noche (1958), Recuerdos de la vida literaria (1961), Me mataron entre todos (1962) y La locura de ser santo (1967), entre otras muchas publicaciones.

Cómo citar este artículo:
Tomás Fernández y Elena Tamaro. «» [Internet]. Barcelona, España: Editorial Biografías y Vidas, 2004. Disponible en [página consultada el ].