Josep Maria Folch i Torres

(Barcelona, 1880 - id., 1950) Novelista, comediógrafo y periodista español en lengua catalana. Dirigió la revista L'Atlàntida, el semanario La Tralla y la publicación semanal infantil En Patufet. Las posturas catalanistas y la intención moralizadora marcan toda su obra, en la que destacan las novelas Almas blancas (1904) y Una vida (1910), y las obras teatrales Los pastorcillos (1919) y La Cenicienta (1920).


Josep Maria Folch i Torres

Inició su carrera literaria como periodista; muy joven aún, dirigió L'Atlàntida, revista fundada por un grupo de amigos de Jacint Verdaguer. También fue director de La Tralla, semanario polémico que adquirió popularidad por sus valientes campañas catalanistas. De 1905 a 1908 estuvo en Francia, donde se refugió al ser perseguido por supuestos delitos de imprenta. En 1905 ganó el primer premio en un concurso convocado por El Poble Català con su novela Aigua avall, en la que se revelaba como narrador de nervio. Con los políticos Martí i Julià y Folguera i Duran, trabajó en la secretaría de la Unió Catalanista; también ayudó a Lluís Millet y Amadeu Vives en las tareas del Orfeó Català. Colaboró en La Veu de Catalunya y en el semanario satírico Cucut.

En 1909 Josep Maria Folch i Torres encontró su verdadera vocación al encargarse de la dirección de la revista infantil En Patufet, de la que había de ser inspirador y principal redactor hasta que dejó de publicarse a la terminación de la guerra civil (1939). Aneja al popular semanario, Folch i Torres publicó una colección de novelas para la juventud que en poco tiempo conquistaron a miles de lectores. Los primeros títulos eran ingenuas aventuras más humorísticas que sentimentales, como En Bolavá detectiu (1911) o Per las terres roges (1912), pero muy pronto nuestro autor derivó hacia la novela rosa, siempre con un fondo moralizador y de una marcada catalanidad en los tipos y los ambientes.

Durante años y años, Josep Maria Folch i Torres fue publicando en su biblioteca una novelita mensual, que era esperada y leída ávidamente por un público de colegiales, adolescentes de ambos sexos, amas de casa y no pocos jóvenes y hombres maduros. Paralelamente publicaba todas las semanas en En Patufet una narración corta bajo el título genérico de Pàgines viscudes (Páginas vividas), en las que era aún más patente la finalidad educativa y moralizadora perseguida por el autor.

Más tarde inició su obra teatral; al lado de felices escenificaciones de cuentos populares infantiles (La Ventafocs y sobre todo Els pastorets, repetidamente representada en Cataluña en fechas navideñas hasta la actualidad), Folch i Torres produjo comedietas de tono e intención análogos a los de sus novelas. Su copiosa y continuada producción tuvo indudable influencia, particularmente en el primer tercio del siglo XX: la exaltación de virtudes como la generosidad, la bondad, la abnegación y el heroísmo cristiano contribuyeron a formar, dentro de una rectitud moral y ciudadana, a varias generaciones de jóvenes catalanes.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].