Manuel Estrada Cabrera

(Quezaltenango, 1857 - Guatemala, 1924) Político guatemalteco que, tras acceder a la presidencia de la República en 1898, instauró un régimen dictatorial que perduraría hasta 1920. Aunque en los primeros años de su presidencia Manuel Estrada Cabrera realizó una política de desarrollo económico y cultural en Guatemala, posteriormente su gobierno cayó en un creciente despotismo y el país se sumió en una profunda crisis.


Manuel Estrada Cabrera

Hijo de Pedro Estrada Monzón y Joaquina Cabrera, el joven Manuel se graduó en la Escuela de Derecho y Notariado de Occidente en 1878. Inició su carrera política en una sala de primera instancia en el departamento de Retalhuleu. Más tarde ocupó el cargo de magistrado de la corte de apelaciones en Quetzaltenango. Fue decano de la Facultad de Derecho de Occidente, alcalde de su ciudad natal y diputado a la Asamblea Nacional Legislativa en repetidas ocasiones.

En el gabinete de José María Reina Barrios (1892-1898) ejerció como ministro de Gobernación y Justicia. Tras el asesinato de Reina Barrios en el curso de un levantamiento, Manuel Estrada Cabrera asumió la presidencia (8 de febrero de 1898). Su dilatado mandato (1898-1920) acabaría convirtiéndose en una tiranía que mantuvo a la población en un estado de terror permanente; la novela de Miguel Ángel Asturias El Señor Presidente (1946) se inspiró en su dictadura. Después de un primer periodo presidencial respetuoso con la legalidad, en 1903 reformó la Constitución para permitir su reelección, y al año siguiente, entre acusaciones de fraude, derrotó en los comicios al general Manuel Lisandro Barillas. En 1908, un frustrado atentado en su contra le facilitó el pretexto para anular a la mayoría de sus enemigos y, sobre todo, neutralizar la oposición de los militares.

Durante la dictadura de Estrada Cabrera el país atravesó por constantes dificultades económicas; de hecho, fue en este periodo cuando más se hizo sentir la dependencia de la economía guatemalteca, centrada en unos pocos productos exportables. Las fluctuaciones de los precios del café incidieron en la disminución de las exportaciones, agravadas por calamidades naturales que afectaron el área cafetalera. Los métodos dictatoriales permitieron a Estrada Cabrera neutralizar el descontento, y la alianza con los cafetaleros se fortaleció mediante el aumento del trabajo forzoso, que compensaba la caída de los precios internacionales del café.

Con el estallido de la Revolución Mexicana (1910), Estrada Cabrera reforzó su política policial en el interior del país, apoyándose en los norteamericanos, que buscaban la estabilidad del área para sus inversiones. Se preocupó por imponer un fuerte control y un cerco informativo que evitara la influencia de aquella sublevación. La Primera Guerra Mundial (1914-1918) representó un golpe a la economía de exportación, pues buena parte de su comercio se producía con Europa; no obstante, favoreció la presencia política y económica norteamericana, que sustituyó a la europea.

Manuel Estrada Cabrera se hizo reelegir tres veces (1904, 1910 y 1916). A lo largo de esos mandatos sufrió numerosos atentados y estallaron algunos movimientos armados en su contra en diferentes puntos del país, que acabaron fracasando. En 1917, sin embargo, comenzó a cambiar el panorama político. Durante ese año y el siguiente varios sismos destruyeron la capital. Aunque estos hechos no incidieron inmediatamente en un problema político, el desquiciamiento de la vivienda sí afectó a diversos sectores urbanos, en especial cuando variaron los alquileres, lo que provocó descontento en los sectores populares y las clases medias.

En 1919 una coalición de terratenientes, comerciantes y profesionales de orientación conservadora formó el Partido Unionista con el fin declarado de promover la unidad centroamericana; en realidad, la formación sirvió de base para la conspiración contra la dictadura. En esos mismos años, sectores urbanos artesanales y obreros plantearon varias demandas sociales que permitieron un proceso organizativo, el cual condujo a la formación de la Liga Obrera. Sus dirigentes pronto coincidieron con la crítica antidictatorial de la clase dominante, a la que también se unió la Iglesia.

Los opositores, primero, buscaron fortalecer su posición en el Congreso al solicitar una reforma monetaria y reforzar la alianza con el resto de países centroamericanos en el marco de una lucha legal. Pero Estrada Cabrera no aceptó las demandas, y confiando tanto en su aparato policial como en el apoyo norteamericano, los reprimió. Poco a poco el conflicto desembocó en una insurrección urbana en la capital, a pesar de los temores de los unionistas por su carácter popular. En abril de 1920 el Congreso declaró incapaz a Estrada Cabrera y lo destituyó, pese a que éste se resistió. Tras una cruenta confrontación entre los insurrectos y las fuerzas gubernamentales durante la llamada "semana trágica", Estrada Cabrera resultó vencido, capturado y hecho prisionero. Pocos años después moría en la cárcel.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].