Cristóbal de Castillejo

(Ciudad Rodrigo, hacia 1490 - Viena, 1550) Poeta español que ha sido considerado el máximo exponente de la pervivencia de la poesía tradicional castellana en el Renacimiento español; en este sentido, su obra representa la fidelidad a las formas tradicionales castellanas y el rechazo consciente de las nuevas maneras poéticas italianizantes.

Cristóbal de Castillejo sirvió al archiduque Fernando I de Habsburgo e ingresó, como monje cisterciense, en el convento de Santa María de Valdeiglesias, aunque su vida eclesiástica distó mucho de ser ejemplar; realizó asimismo numerosos viajes por Europa. Sólo dos composiciones, ciertamente notables, llegó a publicar en vida: el Sermón de amores (1542) y el Diálogo de mujeres (1544). En 1573, bastantes años después de su fallecimiento, Juan López de Velasco preparó y dio a la imprenta una edición póstuma de sus obras completas, agrupadas en tres libros: Obras amatorias, Obras de conversación y pasatiempo y Obras morales y de devoción.


Primera edición de las obras de Cristóbal de Castillejo (1573)

Dentro de las Obras amatorias se encuentran coplas dedicadas a varias mujeres, especialmente a doña Ana de Schaumburg y a doña Ana de Aragón, así como glosas de varios villancicos y romances y traducciones o versiones libres de poetas clásicos como Ovidio y Catulo. Este primer grupo de composiciones incluye una de sus piezas más conocidas: el Sermón de amores (1542), que recuerda el desenfadado y atrevido erotismo medieval de Boccaccio o, en España, del Arcipreste de Hita y el Arcipreste de Talavaera.

En las Obras de conversación y pasatiempo se incluyen poemas satíricos como La fiesta de las chamarras o Transfiguración de un vizcaíno, gran bebedor de vino. Dentro de este grupo sobresale el misógino Diálogo de mujeres (1544), sostenido entre Aletio, que despotrica contra las mujeres, y Fileno, que las defiende y alaba; pero el resultado es una feroz diatriba contra el sexo femenino en la que se sacan a relucir las «cualidades» de las mujeres en sus distintos estados: doncellas, casadas, viudas, alcahuetas, monjas, etc. En el Diálogo entre el autor y su pluma el autor expone con tristeza «los dolores de servir y no medrar»; Castillejo culpa a su pluma de haber perdido treinta años sin mejorar de fortuna; la pluma culpa a su vez al autor, por carecer del carácter conveniente para prosperar en la corte.

Entre las Obras morales y de devoción se cuentan notables diálogos morales. El Diálogo entre la Memoria y el Olvido es una de las más bellas composiciones del poeta, de intención profundamente filosófica; deben citarse también el Diálogo entre la Verdad y la Lisonja y, sobre todo, el Diálogo y discurso de la vida de Corte, el más importante quizá de los escritos por Castillejo, en que son interlocutores Prudencio, viejo y desilusionado, y Lucrecio, joven cortesano con esperanza de medrar; ambos encarnan, obviamente, al autor en diferentes edades. Las obras de devoción son pocas y de escaso interés.

Por sus implicaciones en la historia literaria merece mención aparte Contra los que dejan los metros castellanos y siguen los italianos, composición incluida en las Obras de conversación y pasatiempo por la que Castillejo fue considerado el más significado defensor, en su tiempo, de los metros tradicionales castellanos frente a las innovaciones que, como resultado de la difusión por Europa de la lírica renacentista italiana, introdujeron en España Juan Boscán y Garcilaso de la Vega.

La crítica actual, sin embargo, ya no describe a Castillejo como cabeza de la poesía tradicional castellana como corriente opuesta a la poesía italianizante o petrarquista; antes al contrario, se destaca su cosmopolitismo y su adhesión a los valores del humanismo renacentista. Es cierto que ataca a los tránsfugas (quienes en su inmensa mayoría tampoco dejaron, de hecho, de utilizar los metros castellanos), pero, como se está reconociendo actualmente, no se trata de una actitud reaccionaria, sino de la defensa de una evolución en la lengua poética castellana sin necesidad de caer bajo la influencia de la italiana. En definitiva, la defensa de un nacionalismo literario, uno de los rasgos más característicos del Renacimiento.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].