Ramon d'Abadal i de Vinyals

(Vic, 1888 - Barcelona, 1970) Historiador y político español. Miembro de una antigua familia de Osona con una gran presencia y proyección en el sector agropecuario de la comarca, Abadal era sobrino de Ramón D'Abadal i Calderó, miembro destacado de la Lliga Regionalista, partido en el que el joven Abadal se inició políticamente.


Ramon d'Abadal i de Vinyals

Sus estudios universitarios los realizó en la Universidad de Barcelona, en la que se licenció brillantemente, tras lo cual se doctoró en la Universidad de Madrid, en el año 1911, con la tesis Les Partides a Catalunya durant L'Edat Mitjana, obra en la que se puede apreciar la impronta heredada de su maestro más influyente en derecho, el profesor Hinojosa y Ureña. Abadal regresó a Barcelona para proseguir sus estudios en los Estudis Universitaris Catalans, donde conoció a otro profesor decisivo para su futuro quehacer como investigador, Antoni Rubió i Lluch.

Formó parte del grupo de jóvenes eruditos formados bajo el magisterio directo de Rubió i Lluch, y colaboró junto con otro gran historiador, Ferran Valls i Taberner, en la organización y propagación de los estudios histórico-jurídicos catalanes. Posteriormente se trasladó a París para completar su formación. Estudió en la Escuela de Chartres y en la Escuela de Altos Estudios de la Sorbona, al mismo tiempo que desempeñó una minuciosa labor de catalogación y revisión de los fondos catalanes pertenecientes a la Biblioteca Nacional francesa.

Fue a partir del año 1920 cuando Abadal empezó a interesarse y especializarse en un campo de estudio histórico muy concreto, la época carolingia en Cataluña, es decir, el período condal catalán, labor que le valió el reconocimiento internacional como historiador. En el año 1922, con el apoyo del Instituto de Estudios Catalanes, publicó la obra crítica de todos los documentos escritos relativos a Cataluña anteriores al año 1000.

Pero el inicio del quehacer político de Abadal, en el año 1917, hizo que su actividad como historiador pasase, temporalmente, a un segundo plano. Miembro de la Lliga Regionalista, en los años 1917 y 1921 fue elegido diputado provincial en representación de Vic, y participó de manera activa en la gestión de la Mancomunidad de Cataluña, especialmente en su departamento del Consejo de Pedagogía y de la Escuela de Agricultura.

En el año 1922, Abadal fundó, junto con un nutrido grupo de catalanes progresistas disidentes de la Lliga Regionalista, el partido Acció Catalana, que fue severamente derrotado en las elecciones del año 1931, lo que desató un giro dentro del partido hacia tendencias puramente republicanas y de izquierdas, con el consiguiente abandono de las posturas centristas defendidas hasta entonces. Tal circunstancia hizo que Abadal abandonase la formación para reintegrarse en su antiguo partido. En su nueva tarea política se hizo cargo del órgano de prensa del partido, La Veu de Catalunya, y fundó el periódico L'Instant.

Debido al estallido de la Guerra Civil, Abadal i Vinyals perdió todos los materiales que tenía reunidos en su archivo privado, y se vio obligado a exiliarse en Italia. Al término de la guerra regresó clandestinamente a Cataluña. Josep Puig i Cadafalch le convenció para participar en la construcción del Instituto de Estudios Catalanes y para comenzar la gran labor de reunir toda la colección diplomática del condado catalán.

En el año 1948, cuando contaba sesenta años de edad, Abadal publicó su primera gran obra, la biografía del Abad Oliba, momento con el que inició un período fecundo y muy fluido en sus publicaciones, en las que combinó magistralmente las aportaciones documentales, los estudios monográficos y los trabajos de síntesis y reflexión. El fundamento principal de todas sus investigaciones se tradujo en la que sería su obra maestra, Catalunya carolingia, basada en sus investigaciones de antes de la guerra, pero tamizadas por su nueva concepción sobre la forma de hacer historia, la cual se alejaba bastante del poso neorromántico e idealista defendido por los historiadores catalanes y españoles de la postguerra, por lo que sus presupuestos levantaron una gran polémica entre sus colegas.

Precisamente, el afán realista propuesto en la obra de Abadal facilitó la recepción de sus aportaciones por parte de las nuevas generaciones de historiadores de mitad de siglo que incidieron más profundamente (gracias al camino abierto por Abadal) en cuestiones históricas tan importantes como la articulación de las acciones individuales de los protagonistas de la historia con su referente social, como él había demostrado en la obra del Abad Oliba; en la importancia del sustrato económico de las empresas políticas y espirituales, como en su obra El monasterio de Cuixá; o en una delimitación cronológica de las personalidades nacionales.

Con no menor vigor se dedicó a denunciar, ya entrada la década de los sesenta, la atención absorbente de casi todos los historiadores sobre aspectos exclusivamente sociales y políticos, lo cual implicaba, según su punto de vista, una distorsión grave de la realidad histórica total al relegar a un segundo plano otros enfoques o puntos de investigación como los estudios sobre demografía, instituciones, ideológicos o individuales.

Pese a su avanzada edad, Abadal mantuvo su actividad política como miembro del Consejo privado del conde de Barcelona, Juan de Borbón y Battenberg, pretendiente a la Corona española. En el año 1959, recibió el galardón de la Lletra d'Or de la Crítica catalana por su labor histórica. El día anterior a su muerte le fue entregada la Medalla de Oro de la Diputación Provincial de Barcelona.

Estudioso de la realidad histórica de Cataluña tomando como referente sus épocas más remotas, su investigación del pasado sirvió para profundizar y conocer aún más la realidad presente de Cataluña. El nivel de su trabajo fue inmenso, hasta el punto de que su muerte representó para la ciencia histórica de Cataluña y España una pérdida sólo comparable a la de Jaume Vicens Vives. Hombre de inquebrantable tesón y de una enorme capacidad para sobreponerse a las adversidades, como demostró tras la pérdida de todos sus archivos, estuvo trabajando hasta el mismo día de su muerte, acaecida el 17 de enero del año 1970.

Cómo citar este artículo:
Fernández, Tomás y Tamaro, Elena. «». En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004. Disponible en [fecha de acceso: ].