Alfonso II el Casto
(Barcelona, 1132-Perpiñán, 1196) Rey de Aragón (1163-1196) y conde de Barcelona (1162-1196). Hijo de Ramón Berenguer IV y de Petronila de Aragón, se enfrentó a Raimon V de Provenza por sus derechos sobre Occitania. Llevó a cabo una política agresiva respecto a los musulmanes de Valencia: fundó Teruel, en 1170, como puesto avanzado, y realizó una serie de incursiones que le llevaron hasta Játiva. Gracias a una alianza, en 1186, con Castilla y León, contra Navarra, logró quedar eximido del vasallaje que su padre había jurado prestar a los reyes castellanos. Además, mediante el tratado de Cazorla, estableció con Alfonso VII de Castilla el futuro reparto de las tierras conquistadas a los musulmanes. Más adelante cambió sus alianzas y se enfrentó a los castellanos al lado de Navarra. Estas luchas entre los reinos cristianos finalizaron tras la derrota castellana de Alarcos, frente a los almohades, en 1194, que obligó a un mayor entendimiento frente a la amenaza común.